Era penal a último momento, lo que dice la regla sobre el uso del VAR y la sanción

Penal de último minuto. El combinado de Cruz Azul tenía todo para consagrarse y lograr la victoria ante el Atlas de Guadalajara, pero esta jugada, no pitada por Luis Enrique Santander, despierta muchas dudas sobre lo que está sucediendo en el arbitraje mexicano y el por qué este personaje sigue pitando, a pesar que existen algunos errores por parte de este colegiado.

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Vale recordar el error que tuvo ante Chivas, cuando el conjunto del Rebaño Sagrado tuvo el título en el 2017, pero con un polémico penal no sancionado. De igual manera, aquí hubo un polémico penal no sancionado a favor de Cruz Azul, pero lo que más llamó la atención, fue que Santander esperó al VAR, tenía la chance de ir a ver la jugada, pero decidió terminar el partido, sin recurrir a la tecnología para determinar qué pasa.

De acuerdo al reglamento FIFA, el penal es la única jugada que puede alargar el tiempo de un partido, por tanto, su revisión en el VAR también puede alargar el juego. Sin embargo, llama la atención que Luis Enrique Santander no fue a la pantalla a ver la jugada y sobre todo, terminó el juego. Algo que generó molestia y reclamos de los aficionados cementeros, quienes abuchearon al árbitro. Similar cosa sucedió también con los jugadores del Azul, quienes presentaron reclamo al entrenador y hubo gritos.

De acuerdo al periodista Adrián Esparza Otero, Ignacio Rivero fue quien le reclamó al juez, en la puerta de acceso a los vestidores, aunque el tema no saltó a mayores. Sin embargo, el Azul de nuevo es perjudicado por un elemento que sin duda sorprende, por su manera de trabajar y por los errores que ha tenido al momento de pitar un partido de fútbol.

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