Arriesgando el físico, Ramiro Funes Mori dio la cara por Cruz Azul, literalmente

Un buen defensa es aquel que hace todo lo posible por evitar una anotación en contra de su equipo y Ramiro Funes Mori dio un excelente ejemplo de ello durante el partido entre Cruz Azul y Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) de esta noche en el Estadio Azteca.

Se acercaba el minuto 30 del encuentro correspondiente a la jornada 11 del torneo Clausura 2023 de la Liga MX cuando Ignacio Rivero cometió una falta justo afuera del área y el árbitro Daniel Quintero no dudó en señalar la infracción y mostrarle la tarjeta amarilla al futbolista que, en esta ocasión, fue habilitado por el Director Técnico Ricardo Ferretti como lateral derecho.

Entonces llegó el momento en el que Jesús Corona asumió la responsabilidad a acomodar la barrera de cuatro jugadores, entre los que se encontraba Ramiro Funes Mori con la misión de obstruir el potencial disparo que estuvo a cargo de Eduardo Salvio, quien sí apostó por buscar la portería.

De manera perfecta, valiente y plausible, el zaguero de 32 años de edad recién cumplidos saltó para impedir el paso del balón, sabiendo que podía llevarse un duro impacto en el rostro e, incluso, sufrir una fractura en la nariz o algo similar. Afortunadamente, el golpe no pasó a mayores y solo fue cuestión de tiempo para que el futbolista pudiera recuperarse y seguir en el terreno de juego.

El tiro del ‘Toto’ no parecía tan peligroso.

Da la impresión de que el intento del atacante de Pumas llevaba buena potencia, pero no tanta colocación como para vencer al guardameta Jesús Corona, quien seguramente se hubiera lanzado para evitar la caída de su arco y, por ende, que Cruz Azul se pusiera en desventaja a poco tiempo del final de los primeros 45 minutos del compromiso.